Bajando desde el Monasterio de Leyre ( o camino hacia él, no lo recuerdo), a orillas del pantano de Yesa apareció fantasmagórico, solo habitado por las pacíficas ovejas, paece una estampa de la España de postguerra. ¿Quién sabe cómo se llamó este pueblo?
No hay comentarios:
Publicar un comentario